El mapa de la felicidad

Los peruanos son menos felices que sus vecinos. Esta es la conclusión de Cimagroup, la empresa de análisis y estudios de mercado internacional
que durante el año pasado estudió la felicidad en Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela. En total fueron 5.938 personas encuestadas. "Lo que juega en contra del Perú es la desigualdad socioeconómica, la desconfianza de las personas en las mismas personas y en las instituciones y la insatisfacción con la situación económica personal. Lo que Juega favor, en cambio, es la baja importancia que se da al dinero, el optimismo en el futuro y las expectativas que genera el crecimiento económico", aclara Marcelo Mercado, gerente de Cimagroup. Infelices, pero románticos y menos materialistas. Así seríamos los peruanos o mejor dicho los limeños pues el estudio solo consideró 821 entrevistas realizadas en Lima y Callao. ¿Qué tan feliz se siente?,fue la pregunta que se disparó a hombres y mujeres, jóvenes y viejos, casados o solteros, mujeres que trabajan y amas de casa. Una de las principales conclusiones del estudio peruano fue de las mujeres de26 a 40 años y que no viven con pareja son mas felices que los hombres en las mismas condiciones. Los aspectos que cruzaron esta encuesta tuvieron que ver con la vide amorosa la vida familiar, el nivel de educación, la cantidad de tiempo libre. La salud y la apariencia física. Lo mismo se analizó en los países vecinos,

‘‘Si me‘entonces a. Lo mismo se anali-os. dices que los mas felices son los venezolanos teniendo a un presidente como Chávez, entonces no entiendo nada’’

ESTUDIOS FELICES

¿Pero se puede medir la felicidad? Esta es la pregunta. ¿Acaso lo que
causa placer y bienestar a una persona no puede generar espanto y apatía en otra? ¿Y qué se entiende por felicidad? ¿Es simplemente un estado de ánimo? ¿ Es hacer lo que uno quiere o quererlo que uno hace ? ¿O deberíamos decir como Ortega y Gasset que la felicidad es la vida dedicada a ocupaciones para las cuales cada hombre tiene singular vocación?

El psiquiatra Alberto Péndola está convencido de que la felicidad no se puede medir. "Los parámetros para medirla son miles. Para un filósofo la felicidad puede ser leer o escribir un artículo, para un matemático descubrir la cuadratura del círculo y así podemos dar ejemplos de manera interminable. Lo que sí considero es la sensación de bienestar en determinadas situaciones. El vinculo produce más felicidad que la soledad y si hay comprensión y complementariedad en teoría la cosa debería de marchar con más armonía que pelea". Punto para la familia y para el amor.

El psiquiatra Moisés Lemlij aterriza en la misma dirección: "Yo no creo que la felicidad se pueda medir. ¿En realidad qué se puede medir? ¿El ancho, la profundidad de la felicidad? Los únicos felices que existen son los idiotas, pues la naturaleza del hombre es el progreso por el descontento. Los hombres felices son para los cuentos. Yo prefiero un hombre que esté descontento y sufriendo, pero que esté trabajando.

Prefiero un curioso, que no se quede satisfecho y que se pregunte constantemente dónde está y qué anda haciendo. Obviamente que tenga su rodaja de contento, pero que después siga buscando. Y si me dicen que los más felices de América del Sur son los venezolanos teniendo a Hugo Chávez como presidente entonces no entiendo nada. Me parece el gobernante más cretino de América Latina".
Marcelo Mercado justifica las razones del estudio:" El grado de felicidad declarado por una persona de si misma tiene alta correlación con la felicidad que los otros le atribuyen.

Para nosotros es importante estudiarla felicidad porque como algunos piensan el objetivo principal de las políticas públicas debiera ser alcanzarla mayor felicidad para el mayor número de personas".

‘‘El vínculo produce más felicidad que la soledad. Si hay comprensión, la cosa debería marchar en armonía’’

EL CLIMA DEL DINERO Y LA FAMILIA

Este estudio ha revelado que un país pobre como Bolivia y uno rico como
Chile tienen similares grados de felicidad: 67% y 66% respectivamente.
¿ Es la confirmación de que el dinero no hace la felicidad? Mercado piensa que sí: "Y más aun, el desarrollo económico de un país tampoco la produce. Mas importante es el nivel de desigualdad entre los países.
Los países con mejor distribución del ingreso son más felices que los países con mucha desigualdad". El doctor Péndola está de acuerdo en este punto: "Es cierto, el dinero no hace la felicidad, pero las penas con pan son menores. A partir de la satisfacción de necesidades básicas uno puede tender a la felicidad, pero no necesariamente obtenerla". Por si acaso el Perú es el país con menos satisfacción económica: 18%

La idea de que el clima es un factor decisivo también se registra. Según el estudio, las personas que viven con clima más cálido son más felices que aquellos que viven abrigados. En palabras de Mercado esto puede influir en el hecho de que venezolanos y colombianos sean más felices que sus vecinos del sur. Calurosos y repletos de históricos problemas, los colombianos ocupan el segundo lugar. Y el dato no sorprende pues si todo dependiera de la bonanza y déla seguridad nacional debería haber sido Chile el ganador absoluto y sin embargo dicen ser infelices.

"Chile siempre me llama la atención. Tiene una tradición democrática, pero su escudo es particular: por la razón o por la fuerza. Quizá tenga que ver con su estado de ánimo. En todo caso ellos tienen motivos para ser felices, para empezar tiene grandes poetas y dos Premio Nobel de literatura. Tienen a Neruda y Mistral", reflexiona Lemlij.

"El sentido que uno le da a la vida y el hecho de estar en actividad me parecen claves para entender la felicidad", explica el psiquiatra y psicoanalista Eduardo Gastelumendi, y agrega: "Cuando algo nos absorbe nos sentirnos bien y felices; en cambio la infelicidad aparece cuando una parte de nosotros está bloqueada o inactiva". Para consuelo de los limeños, el doctor Lemlij recuerda que es mejor la melancolía a una sonrisa insulsa."La melancolía teda dulzura y es diferente de la tristeza o de la depresión. En el Perú la depresión es un gran problema, pero tengo la sensación de que ya andamos con menos baches. En Urna, por lo menos, nos sentimos menos miserables. En el país hay más ánimo de producir y trabajar. Por eso las cifras de creciente optimismo. A mí me aburre la felicidad, prefiero un estado entre la satisfacción y la melancolía. Estar en la cola no debería apenarnos’’

Que los cereales, la leche y el pavo generan más felicidad, que la dopamina y la serotonina, que los baños con champaña. Qué importan los secretos de curanderos y nutricionistas para conseguir felicidad, según este estudio es la familia el factor que mejor explica por qué una persona es más feliz que otra.
Y esta es una coincidencia con estudios similares. "Pareciera ser que la familia absorbe todos los lazos comunitarios y afectivos que necesitan las personas", concluye Marcelo Mercado y sonríe cómplice: también su familia es su principal fuente de felicidad.